Un nuevo inversionista, micrófonos silenciados y Felipe Loyola: los detalles de la nueva junta de accionistas de Fernández Vial. A casi una semana del término de la temporada deportiva, los accionistas se reunieron vía telemática para analizar el momento del club … y el futuro.
Sí, porque una cita que lideraron Adrián Glickman y Martín Iribarne arrojó varias conclusiones, de acuerdo a lo que supo Sabes Deportes. Primero y como base de una junta que arrancó a las 17 horas del viernes, tal dupla directiva aseguró nuevamente que seguirá en el club para 2025. Según la cúpula trasandina, hay abogados que les aseguraron que «bajo su interpretación» tienen todo el derecho de quedarse. ¿Y cómo? Dentro de la interpretación, apuntan a que en el contrario asomaría la palabra «fútbol» y no «fútbol profesional».
Para mantenerse en la institución, eso sí, detallaron que necesitan pagar alrededor de $70 millones de pesos. Así, entregarían el certificado de «no deuda» a la Anfa y podrían -según ellos- competir en Tercera.
¿Y cómo pagarán aquello si no fueron capaces de hacerse cargo del club en casi todo 2024? En la presentación expuesta al resto de accionistas, aseguraron textualmente que «para el pago de los $70.075.001 que vencen el 10 de diciembre, contamos con el pago de las suscripciones hechas por parte de los accionistas, la venta de Diego Sanhueza, el pago por mecanismo de solidaridad por la venta de Felipe Loyola y el ingreso de un nuevo inversionista a la Sadp».
En ese ítem hay un aspecto tan clave como sorprendente. De los casi $70 millones que debe cubrir el club, ya contarían con la mitad. ¿Y cómo? Dos integrantes de la junta que tienen sus acciones suscritas y no pagadas se comprometieron en la asamblea a ponerse al día a la brevedad. Así, restarían «solamente» $35 millones.
Hubo opiniones diversas en la cita, con un grupo de accionistas que manifestó dudas sobre la continuidad y la información contable. Fue tal la molestia de Martín Iribarne que en un momento le expresaron a un accionista que «si no le gustaba, vendiera sus acciones o se comprara su propio club». Hubo micrófonos silenciados por ser «pro corporación». De todas formas, hay varios quienes siguen apoyando a Glans en su intención por seguir. Cabe destacar que en más de una ocasión el grupo trasandino ofreció disculpas por la pésima administración de la actual temporada. En esa línea, se comprometieron, supuestamente, a «dar un golpe y ordenar la casa».
Así se escribe un nuevo capítulo dentro de una historia llena de interpretaciones, dimes y diretes, discusiones, deudas … y con la corporación buscando recuperar el club tras una temporada para el olvido dentro y fuera de la cancha.
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