Germán Vargas es uno de los nombres del remo en Concepción. Con una trayectoria marcada por la disciplina y esfuerzo, ha sido pieza clave en el Club Canottieri Italiano, una institución que desde a mediados del siglo XX ha impulsado el deporte náutico en la región del Biobío.
Germán Vicente Vargas Salazar es un joven de 20 años que representa al club de remo Canottieri Italiano. A lo largo de su carrera como deportista ha logrado podios a nivel regional, nacional e internacional, consiguiendo entrar la selección regional.
Lo que le permitió además representar al país a nivel internacional en la Copa América 2019 realizada en Valdivia, logrando el séptimo lugar. Este año, a nivel regional, Germán ha obtenido el single sub 23, el doble sub 23, el 2 sin sub 23 y el 2 sin ligero.
La vida de Germán no siempre estuvo ligada al remo, ya que cuenta que en su niñez jugaba regularmente fútbol, pero que su padre fue el que lo adentro en el mundo del deporte náutico poco a poco. En el año 2017, cuando tenía apenas 12 años, el joven deportista inició su camino en la disciplina. “Me sentía mejor física y mentalmente haciendo remo que fútbol”, comentó Vargas a la hora de decantarse por uno de los deportes.

Vargas desde entonces ha practicado remo de manera disciplinada, buscando llegar a su mejor nivel cada día al que va a entrenar. Disfrutando cada entreno, pero poniendo la dedicación y esfuerzo necesario para estar de la mejor forma a la hora de competir. Pero el deporte de alto rendimiento no es algo simple, cuenta con un lado positivo y un lado oscuro, que muchas veces es invisible para la audiencia.
Para el deportista del club Canottieri Italiano lo más complicado a la hora de competir en esta disciplina, es perder. Señala que él ha perdido más veces de que la que ha ganado, que es ahí cuando la mente te juega una mala jugada. Pero son en esos momentos en los que Germán se dice a sí mismo: “No puedo frenar aquí, tengo que mejorar, tengo que seguir esforzándome”.
Entre todos los logros de Vargas hay uno que marca un antes y después en su trayectoria como remero. Fue cuando en su primer Open ligero logró conseguir un tercer lugar siendo cadete con su compañero Amara Soto, compitiendo en ese entonces con juveniles mayores a ellos, pero entrando con determinación en el podio de los 10 botes participantes.
Entre sus mayores conquistas figura un campeonato nacional. En el que Germán se coronó campeón en el 2 sin timonel y en el 8 sin timonel, reafirmando su dominio en ambas pruebas
Por otro lado, la preparación de Vargas y los remeros en general dependerá del momento del año en el que se encuentren. Existe una pretemporada y una temporada. Durante la pretemporada los deportistas se concentran en hacer trabajos de resistencia física, haciendo tramos de remo de 15 a 20 km, para así mejorar su capacidad aeróbica. En cambio, en la temporada cuando los deportistas se aproximan a competir, los ejercicios son más cortos pero intensos, enfocándose más en la potencia.
Germán se encuentra cursando su segundo año de ingeniería comercial y nos comenta que no ha sido fácil compatibilizar sus estudios con el remo. “La universidad me da cero apoyo”, señaló. Vargas ha tenido que faltar a clases durante las etapas más importantes de competición, priorizando el remo por encima de los estudios.
Esto ha sido un gran problema en la vida universitaria de Germán. La universidad se muestra rígida en el aspecto de ceder cierta flexibilidad frente a peticiones de estudiantes que cuentan con una vida más allá de la universitaria. Generando que los alumnos al final del día no puedan explotar sus talentos de la manera adecuada.
Y es aquí donde entra su familia. Su apoyo incondicional, que lo ayuda tanto en lo psicológico, como en tener un mejor rendimiento físico. Vargas recalca que gracias a ellos es la persona que es y que son su motivo para seguir día tras día dando su máximo esfuerzo.
“Para mí lo más importante al momento de practicar este deporte, es disfrutar. A mí me gusta disfrutar las cosas, aunque algunos hablan de que el alto rendimiento, no se disfruta. A mí a la hora de entrenar, me gusta, porque siento que, si uno no disfruta y lo hace por alguna presión externa, no va a mejorar. Algo que yo busco es que al final del día disfrute y que sea feliz haciendo lo que hago”, afirmó el remero.
Germán se proyecta en el futuro practicando remo de manera constante, aunque quizá no a nivel competitivo. Se imagina asistiendo al club diariamente, entrenando, apoyando a la institución y participando en las competencias, asegurando su compromiso con el deporte y el club.
Dejando en claro que el remo ha pasado a ser parte de su vida y que no se imagina sin él. Es por eso por lo que también aconseja a todos los que quieran entrar en este deporte a ser disciplinados y responsables, y aceptar que van a fallar más veces de las que tendrán éxito. La frustración y los momentos difíciles son parte del camino, y lo importante es aprender de cada error, ya que es la única manera de mejorar y ganar experiencia. Deben equilibrar la luz y la oscuridad: valorar los logros, pero también aprender de las derrotas.
El remero penquista Germán Vargas se encuentra actualmente en una intensa etapa de preparación con miras al Campeonato Nacional Series Altas 2025.
Este crucial torneo, que se llevará a cabo en la Laguna de Curauma, Región de Valparaíso, se desarrollará entre el 6 y el 9 de noviembre. El joven deportista chileno tiene como objetivo principal subir al podio y asegurar una representación destacada para el Club Canottieri Italiano.
El club Canottieri Italiano nació en 1949 en Concepción con el propósito de promover la cultura y deporte. Impulsado por Víctor Tessen Sántin, un dirigente de raíces italianas que transformó la historia del remo en el sur de Chile.
Tesser fue quien compró el primer bote y fundó la rama de remo del club, marcando el inicio de la práctica en la zona. Su liderazgo también permitió la creación, en 1951, de la Asociación de Remo de Concepción, que integró a los clubes Alemán y Español, consolidando el desarrollo colaborativo de la disciplina en la zona, dejando de ser exclusivo este deporte de las regiones Valparaíso y Valdivia.
Víctor Tesser y otros dirigentes participaron en la creación de los Campos Deportivos Llacolen, proyecto que hizo crecer la infraestructura de la comuna, algo que fue clave para el crecimiento del deporte náutico en San Pedro de la Paz.
Tras la venta de las acciones del Stadio Italiano de Campos Deportivos Llacolén, el Club de Remo Canottieri Italiano se constituyó como entidad anónima, abriéndose a toda la comunidad y enseñando los valores del club.
Hoy en día, el club es considerado una de las agrupaciones de remo más importantes a nivel nacional, por su rol formador y educador. Proyectando a los jóvenes y a sus entrenadores a un alto nivel competitivo. Hoy, con más de 70 años de historia, el club mantiene en colaboración constante con la Municipalidad de San Pedro de la Paz, el Gobierno Regional y el IND con el propósito de seguir desarrollando este deporte en la zona.
Síguenos en YouTube o Instagram como Sabes Deportes.