Universidad de Chile sufrió una sorpresiva derrota por 2-1 ante Curicó Unido este domingo en el duelo de ida por los octavos de final de la Copa Chile. El revés generó múltiples críticas, especialmente hacia el entrenador Gustavo Álvarez, quien no logró resolver el funcionamiento ante las bajas sensibles que afectaron el funcionamiento del equipo.
A pesar del tropiezo, el estratega argentino ha construido una base sólida que respalda su trabajo desde el arranque de la temporada. Uno de los argumentos más contundentes es el impresionante crecimiento del valor de mercado del plantel bajo su gestión.
Cuando Álvarez tomó las riendas del equipo en enero de 2024, Universidad de Chile presentaba una tasación total de 15,73 millones de euros, según cifras de Transfermarkt. Hoy, tras meses de buen rendimiento colectivo y la consolidación de varios jugadores, la misma plataforma cifra al plantel en 26,65 millones de euros.
El alza supera los 10 millones en apenas medio año, reflejando tanto el repunte futbolístico como el efecto del proyecto liderado por Álvarez. Con este notable incremento en el valor del plantel, queda en evidencia que el proceso Álvarez va más allá de un resultado aislado. Universidad de Chile no solo ha vuelto a competir en lo alto, sino que también ha logrado potenciar el desarrollo y proyección de sus jugadores. El desafío ahora será sostener esta evolución en el plano deportivo, recuperarse del traspié en Copa Chile y seguir construyendo un equipo que combine rendimiento, identidad y ambición.
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