José “Pepe” Mujica dejó una imagen inolvidable durante una de sus visitas a Chile: una foto con una camiseta que criticaba directamente a Blanco y Negro, la concesionaria a cargo de Colo Colo. Esa postal nació por iniciativa de un grupo de estudiantes de la Universidad de Santiago que quiso entrevistar al ex presidente uruguayo.
Durante el encuentro, los jóvenes conversaron de fútbol con Mujica. Él los felicitó por la clasificación de Chile al Mundial y hablaron sobre el repechaje que Uruguay disputó ante Jordania. En ese momento, los estudiantes le explicaron la situación que vivía Colo Colo con la administración de Blanco y Negro, lo que generó una reacción espontánea de Mujica: “En Uruguay sería impensado que una sociedad privada controle así a un club popular”, les dijo.
Así nació la icónica fotografía donde se le ve con una camiseta de protesta. No fue una acción planeada, sino un gesto político y cultural que refleja su cercanía con el pueblo y su postura crítica frente al modelo de gestión empresarial en el deporte.
Revisa aquí el momento:
Pepe Mujica, el fútbol y la identidad popular
Mujica siempre mantuvo un vínculo fuerte con el fútbol. En múltiples entrevistas, reconoció que creció con una pelota bajo el brazo y que el fútbol, más que un deporte, representa una parte fundamental de la cultura latinoamericana. No jugó profesionalmente, pero sí lo practicó con amigos en los barrios de Montevideo durante su juventud.
En Uruguay, Mujica se vinculó principalmente con el club Cerro, un equipo obrero del barrio Villa del Cerro, al que considera más que un equipo: una identidad barrial. Más allá de camisetas, siempre defendió la importancia de mantener el fútbol lejos de la especulación empresarial y cerca de sus raíces sociales.
En su rol como figura política, también aprovechó el fútbol para transmitir mensajes de unidad, humildad y trabajo colectivo. Cada vez que pudo, usó al deporte como ejemplo para hablar de justicia, igualdad y comunidad, principios que siempre lo acompañaron en su carrera pública.
La muerte de Mujica no solo golpea al mundo de la política, sino que también deja sin una de las voces más lúcidas a la hora de pensar el deporte desde una perspectiva humana y con conciencia social. Tras un año enfrentando una enfermedad incurable, tal como él mismo reveló en enero, el mundo entero lo despide a los 89 años con muestras masivas de cariño y respeto.
Mira el primer capitulo de «Arriba de la Pelota» en nuestro canal de Youtube
