El Brasil contra Uruguay se jugará el 19 de noviembre en el país de las playas, sin embargo, la novedad de este partido es que implementará el protocolo anti-racista propuesto por la FIFA. Así formando un precedente en la lucha contra esta lacra para la sociedad y siendo el primer partido en el país implementando esta norma.
Este protocolo consiste en cruzar los brazos en forma de X a la altura del pecho, señalando que existe discriminación racial en la cancha. Este gesto se divide en tres instancias, en la primera el árbitro tiene la facultad de detener el encuentro. Seguidamente los jugadores junto al juez del partido abandonarían el terreno de juego y finalmente si los ataques raciales no cesan se suspenderá el partido.
Este gesto se aprobó por unanimidad en el 74º Congreso de la FIFA en Bangkok el 17 de mayo de este año. El gesto global de brazos cruzados para señalar el abuso racista se adhirió al fútbol y se implementó en la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA Colombia 2024.
Los detalles sobre este proceder se explicaron según la Federación de Fútbol Brasileño (CBF) a todos sus jugadores, equipo técnico y cuerpo arbitral. En adición desde la federación indicaron que este protocolo se explicará en la cancha.
Según el presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, «Cuando entré en el Consejo de la FIFA en marzo del año pasado, anuncié que la lucha contra el racismo sería una de mis prioridades en la organización. De ahora en adelante, el gesto va a usarse en todos los partidos en nuestro país», sentenció el dirigente.
