¿Qué hay detrás de la denuncia de la Anfp contra Deportes Concepción? Mucha sorpresa generó la demanda del ente rector del fútbol chileno al «León». O quizás no tanta, entendiendo que el fondo es claro y conciso. Sin embargo, surgen dudas y suspicacias en torno al momento y los motivos del por qué asoma en este momento la denuncia.
Específicamente, el 23 de julio de 2024 la Anfp ingresó una demanda contra Deportes Concepción. Específicamente al Club Social, no a la sociedad anónima. Es clave marcar tal diferencia. La notificación de esta se hizo a las 10:55 horas del 4 de septiembre al representante legal.
¿A qué se debe la denuncia? Allí es donde no hay mucho misterio. Tras ser desafiliado en 2016, el club inició un largo proceso para volver a competir, retornando a la cancha en 2018. Sin embargo, previo a ello, el Club Social tuvo que reconocer las millonarias deudas que heredó Fuerza Garra y Corazón SADP. Aquello fue una exigencia que entre Anfa y Anfp establecieron para que los lilas pudiesen volver a competir. Deportes Concepción, en ese momento, aceptó. Pero no fue un sí tan sencillo ni rotundo, sino que a cambio de realizar una auditoría forense para determinar el flujo de tales fondos.
En detalle
¿Cuánto dinero era? Muchísimo, específicamente 1.897 millones de pesos. El acuerdo -certificado de no deuda- comprendía un pago de 48 cuotas por 370 UF y una última de 321, que debían ser pagadas entre 2022 y 2026, o cuando Deportes Concepción retornara al fútbol de Primera B. El acuerdo siempre existió y en más de una reunión con la Anfp por otros temas, ni siquiera se tocó el tema. Se asumía como lógico. En tal fórmula de pago, los aportes por la televisión asomaban como claves para saldar una deuda que, de todas maneras, debía resolverse de acuerdo a la auditoría forense.
¿Qué pasó con ella? ¿Se hizo? No. Y allí es donde llama la atención que la denuncia omita aquel ítem. En el acuerdo establecido en 2018 se enuncia que «los montos correspondientes a giros de cuentas corrientes de la ex concesionaria, Fuerza Garra y Corazón SADP, serán sometidos a una auditoría contable llevada a cabo por PriceWaterhouseCoopers, Ernst & Young PWC, Deloitte o KPMG, la cual será elegida de común acuerdo entre las partes».
El momento en que llega esta denuncia sorprende, además, por salir a la luz pública justo cuando Deportes Concepción y el resto de equipos de Segunda División anunciaron acciones legales contra Anfp por las desigualdades y precariedades de la categoría. Entre líneas, además, se desprende que puntualmente no es Anfp quien impulsó esta denuncia. ¿Quién entonces? Por los pasillos de la Avenida Quilín 5635 y en más de una ocasión, varios timoneles de una silenciosa cúpula con influencia en el Consejo de Presidentes y el directorio de la Anfp ya venían insistiendo hace rato en la deuda de Deportes Concepción.
Además, y por último, en una historia que seguirá escribiendo más capítulos … ¿realmente la Anfp quiere embargar los Campos Deportivos de Nonguén y/o que Concepción le pague rápidamente lo adeudado? El ente rector del fútbol nacional tiene números tan rojos, que acreditar deudas para que los balances no sean tan catastróficos asoma como una conveniente estrategia.
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