Un aplazamiento frustrado: lo que no se supo del Deportes Concepción vs San Marcos de Arica en el CAP. Muy, pero muy movida fue la mañana del sábado 17 de mayo en Talcahuano.
Tras la intensa lluvia que cayó en el Biobío, la cancha quedó inundada en varios sectores. Por ello y con el fantasma de una suspensión dando vueltas, en Deportes Concepción triplicaron los esfuerzos para que aquello no ocurriera. Cerca de las 9 de la mañana arrancaron los trabajos para drenar las pozas de agua que tenía la cancha, específicamente a la entrada del túnel que va desde los camarines y frente a las bancas de suplentes.
Con el paso de los minutos, el cielo se despejó y alumbró hasta el sol. Por ello, toda la expectativa y optimismo desplegados en torno a recuperar la cancha, crecieron enormemente. El terreno de juego mejoró muchísimo, la gente ya estaba ingresando al estadio y a falta de la revisión oficial por parte de los árbitros, el mensaje era uno solo: el partido entre Deportes Concepción y San Marcos de Arica se jugará si o si.
De ida y vuelta
Cerca de las 11 de la mañana, los árbitros encabezados por Cristian Galaz recorrieron la cancha para la habitual inspección tras un temporal. Caminaron con una pelota, la hicieron rodar por el pasto y buscaron que diera botes en ciertos sectores. Allí se encontraron con una superficie que si bien parecía apta para jugar, aún tenía problemas en algunas zonas donde la pelota se quedaba trabada. La revisión duró más de lo habitual.
Al rato, a eso de las 11:25 horas, el cuerpo arbitral decidió que la cancha no estaba en condiciones para que se jugara el partido. Sin embargo, suspender no era la opción. Entre los clubes protagonistas, Anfp y réferis llegaron a un consenso que lo mejor era aplazar el partido para que la cancha acabara de drenar mejor en ciertos sectores. El trabajo de algunos funcionarios del club y el sol eran fundamentales para ello. En primera instancia la idea era esperar 30 minutos, hasta 45 o incluso una hora. Pero el partido se iba a jugar.
Estaba todo listo, acordado y decidido … o casi. Solamente restaba un visto bueno, que no llegó. Carabineros se opuso a aplazar el choque, con el único argumento de que «el partido se juega a las 12:30 horas, o no se juega». Así de simple. No hubo lugar para réplicas. La sorpresa y desazón fueron totales.
A esa altura, siendo las 11:35 horas, no había mucho más margen o alternativa que intentar recuperar la cancha en tiempo récord para que el partido se disputara. Por ello, los trabajos con los escobillones para barrer el agua se intensificaron. Como medida de presión, incluso, ambos elencos decidieron que sus arqueros saltaran rápidamente a la cancha a calentar para evitar instalar cualquier duda de posible suspensión.
Así, sin certezas incluso por parte de los mismos planteles restando menos de una hora para el pitazo inicial, el reloj avanzó, el partido acabó llevando a cabo y Deportes Concepción le ganó 1-0 a San Marcos de Arica con gol de Jonathan Espínola.
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